“Childcare On” una idea innovadora – Mujeres que emprenden –
En la actualidad, encontrar una idea innovadora es complejo, muy complejo, sobre todo porque parece que todo ya está hecho y no hay nada nuevo por hacer. Sin embargo, hay ocasiones en las que nos topamos con ideas geniales que nos hacen reevaluar lo que estábamos pensando y solemos decir: “Ojalá se me hubiera ocurrido esto a mí antes”, entonces nos preguntamos ¿cómo pudieron llegar a esa idea? Y es que la musa de la inspiración en ocasiones es esquiva y suele presentarse en momentos y lugares inesperados.
Este es el caso de Tania y de su proyecto empresarial Childcare On, una idea innovadora que se originó gracias a la musa de la empatía, una facultad que tenemos todos, aunque algunos en menor o mayor grado, y que en muchas ocasiones no sabemos cómo utilizarla.
Entendemos la empatía como la capacidad de comprender y compartir lo que otro puede sentir y con ello participar en una realidad ajena a la nuestra. Y fue esto mismo lo que motivó a Tania, una estudiante a punto de graduarse de Ingeniería Industrial, sin hijos y sin ningún nexo con el mundo de la educación infantil, a crear una aplicación que permitiera la comunicación fluida entre las guarderías y escuelas con los padres de familia, permitiendo el acceso al día a día de sus hijos con unos simples clicks en su móvil, de forma segura, garantizando la tranquilidad de los padres. Padres como sus compañeros de oficina, a quienes oía quejarse a diario de lo complicado que era estar al tanto de la agenda escolar de sus hijos además de todas las otras cosas que tenían por hacer.
“Sentía angustia de ver a esos padres, yo podría verme así en algunos años.”
Pero iniciar un proyecto de esta complejidad no es tarea fácil, pues tener una idea innovadora es un buen inicio, pero hay mucho por hacer después de esto. Y es que para quienes hemos tomado el camino de la emprendeduría sabemos que la autodisciplina, la organización y formación son puntos claves para no desfallecer en el intento. Hace falta ser obstinado y creer en uno mismo. Tania recuerda que al empezar su carrera de Ingeniería falló en su primer examen de álgebra. Preocupada por esto, buscó a su madre quien le consolaba recordándole que “eso de estudiar ingeniería era muy duro”, pues en el fondo siempre quiso que siguiera la profesión de la familia: la salud. Por supuesto, Tania, que no es de aquellas que se dan por vencidas, persistió, su personalidad metódica y perfeccionista le ayudó, y no solo a terminar la carrera sino que además se especializó en química industrial y organización industrial, siendo esta última la que amplió su campo de acción, enseñándole que todo el conocimiento adquirido en los años de estudio se podía gestionar hacia diferentes sectores.
En su proyecto final de estudios, Tania vio la oportunidad de materializar allí todo esto que venía pensando. Pero este era un proyecto difícil de llevar en solitario, así que hizo su primer elevator pitch a Sergio, su novio y coocreador de la aplicación, quien al escuchar el proyecto supo que sería un gran reto, pero que valdría la pena. Tras meses de trabajo llego el día de la sustentación frente al jurado. Y lo que hasta ese día había sido un proyecto pensado como un ejercicio académico empezó a proyectarse como una idea de negocio, gracias al consejo de uno de sus profesores que vio mucho futuro en su idea.
Además del trabajo adelantado, Tania postuló su proyecto al programa de formación de Donas Emprendedoras de Barcelona Activa, donde obtuvo la formación y el asesoramiento en temas administrativos y fiscales que estaban fuera de su especialidad, sabiendo de antemano que si quería hacerlo en serio, debía conocerlos y llevarlos a cabo.
Para este momento el proyecto ya había logrado pasar de ser solo una idea innovadora a ser una empresa ya constituida, y con esto empezaba una nueva etapa, con nuevas oportunidades y nuevas dificultades. Uno de los retos más complejos para Tania ha sido trabajar el área de recursos humanos, pues no siempre es fácil transmitir a los colaboradores el mismo sentido de pertenencia, aunque no significa que no se encuentren personas entusiastas que crean en el equipo y en el proyecto.
“A veces afecta más que un compañero te falle a que un cliente te diga que no”
Otro de los retos que enfrentan en su gestión de promoción y comunicación tiene que ver con el posicionamiento de su nombre de empresa, ya que su objetivo en el proceso de naming era reforzar el cuidado y la conectividad, y para esto escogieron un nombre en inglés, que lograba comunicar lo que ellos buscaban, el problema es que al no estar en la lengua local genera dificultades para recordarlo, por el contrario su imagen ha sido el elemento de identificación que les ha dado notoriedad y por el cual los reconocen en el sector.
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Día a día, Tania y su equipo siguen trabajando para hacerle frente a los retos y dificultades que supone el competitivo mundo de las aplicaciones tecnológicas, seguros de que el trabajo duro y el amor por lo que hacen se verá reflejado en los buenos resultados como hasta ahora, llevando a padres y a escuelas las soluciones tecnológicas que les permitirán estar “siempre cerca, aunque estén lejos”.
Consejos de Tania:
- “No te pongas límites y arriésgate, no escuches a los que te dicen que no podrás, sé obstinado y cabezón”.
- “Se empírico, escribe poco y ejecuta más, si tardas 2 años perfeccionando tu idea, tal vez eso que era genialidad ya no lo sea”.
- “Rodéate de un buen equipo de trabajo, al principio vives de las emociones, y debes vivir en un ecosistema de personas que tengan la misma actitud que tú”.
Si deseas conocer más sobre el proyecto de Tania, visita su página web childcareon.es
Imagen de la interfaz de la plataforma propiedad de Childcare on